Descubre por qué es la ósmosis inversa es la mejor y más avanzada solución para purificar el agua.
Cada vez con mayor frecuencia necesitamos obtener agua de excelente calidad para nuestra vida diaria. Para esto, necesitamos procesos que permitan purificar el agua de forma eficiente y segura. Uno de los más extendidos y avanzados es la ósmosis inversa.
¿Qué es la ósmosis inversa?
Es un proceso mediante el cual se purifica el agua eliminando las partículas en suspensión. La tecnología de ósmosis inversa es un tratamiento físico-químico que elimina impurezas pasando el agua a través de membranas semipermeables.
La ósmosis inversa conlleva una inversión del proceso de ósmosis de forma artificial. Para ello, es necesario aplicar una presión exterior mayor a la presión osmótica. Y de esta manera, el agua que tiene mayor cantidad de sólidos disueltos fluye hacia la solución menos concentrada. Como resultado de este proceso, se obtienen dos fluidos bien diferenciados: uno muy concentrado, en el que han quedado todos los residuos y, por otro lado, el agua desmineralizada.
¿Para qué sirve la ósmosis inversa?
Esta purificación elimina iones, moléculas y partículas de mayor tamaño alcanzando un 99% de efectividad de acuerdo con estudios de la Organización Mundial de la Salud. En general, se venía utilizando en plantas de tratamiento para potabilizar agua en regiones del mundo donde el agua dulce escaseaba. Pero, en la actualidad, su aplicación ha llegado a usos domésticos en zonas urbanas debido a la preocupación por conseguir agua purificada de alta calidad.
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¿Cómo funciona el proceso de ósmosis inversa?
A diferencia de los procesos químicos como UV, jabones, ozono, entre otros, la ósmosis inversa atrapa las partículas al hacerlas pasar por una serie de membranas o mallas concéntricas de diferentes tamaños. Sin embargo, no debe confundirse con el simple filtrado físico, ya que el agua a tratar avanza por tuberías a elevada presión y es en dicho avance que parte de la misma escapa a través de las membranas.
Los elementos más pesados quedan atrapados en mallas. El proceso parte de la idea de vencer la presión osmótica. Esto es, como en todo sistema implica dos líquidos y una membrana semipermeable, por ejemplo, desde nuestras venas hasta la savia en el interior de los árboles, que tiende a fluir de forma tal que el líquido gana partículas solubles. En otras palabras, se concentra con el paso del tiempo con más partículas.
La ósmosis inversa da la vuelta al proceso agregando presión en el extremo de la solución concentrada y, de esta manera, eliminando las partículas disueltas. Este tipo de procesos resultan interesantes porque el agua impura puede circular a elevada presión en circuitos cerrados formados por tuberías de membrana. El fluido recorrerá todo el sistema y, con cada ciclo, el agua pura recorrerá las membranas separándose de las partículas indeseadas que quedarán atrapadas.
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Filtros de ósmosis inversa en el hogar
Este sistema de avanzada tecnología ha ido ganando relevancia en los últimos años, influenciado por la generalización del uso de los filtros de ósmosis inversa domésticos que popularizaron su utilización.
Este proceso de ósmosis inversa permite obtener agua de altísima calidad y tiene muchos beneficios. Entre lo más destacado encontramos que es beneficioso para la salud y totalmente respetuoso con el medio ambiente. Además, permite eliminar del agua las sales, compuestos orgánicos sintéticos, pesticidas, patógenos y la mayoría de las sustancias contaminantes.
El proceso de ósmosis inversa es uno de los más usados, tanto en el ámbito hogareño y comercial como industrial. Y esto se debe a que brinda como resultado un agua pura, con bajo contenido en sales y sin contaminantes.
